Es Nicolás Sosa, uno de los jóvenes que este sábado 24 recibió el decreto que lo convierte en beneficiario del estímulo económico, un premio que el Gobierno provincial otorga a los alumnos con mejores promedios para que desarrollen estudios de nivel superior. Aluminé Benítez y Lautaro Ortiz también expresaron su satisfacción por esta ayuda para formarse como profesionales.

El dilema que se planteaba Nicolás Sosa (tal vez el mismo que han tenido otros chicos de su misma edad y situación social) finalmente pudo ser resuelto gracias a la Beca al Mérito. “Yo tuve muchas dudas entre estudiar o trabajar. Porque, lamentablemente, estoy muy mal económicamente. Era ‘o estudio o trabajo’. Cuando me dieron esta noticia (de que era beneficiario de la Beca al Mérito) dije ‘voy a estudiar’. Fue mucha felicidad para mí”, expresó Nicolás, de 18 años, vecino de San Luis capital, quien siente que este estímulo ya le “abrió muchas puertas”.

“Egresé de la Escuela Generativa Universo D-Mentes, en 2023. Empecé la Tecnicatura de Redes y Sistemas en la Universidad Nacional de San Luis (UNSL). Es una carrera de tres años. Me encanta porque llevo una parte de mi vida con las redes, sistemas, computación”, contó el joven, que ya transita el ingreso en la UNSL.

Al dinero de la beca tiene pensado usarlo para afrontar distintos gastos de la carrera. Además, está independizado, por lo que le viene bien para comprar mercadería y pagar cuentas.  “Aprender es lo más esencial y es el poder que te da en este mundo. Hay que dar todo, te sentís muy orgulloso de vos mismo. La superación es infinita”, manifestó.

Lágrimas de alegría 

Con la emoción a flor de piel. Así estaba este sábado Aluminé Benítez, una joven de Santa Rosa del Conlara que recibió su decreto como beneficiaria de la Beca al Mérito. En algún momento, la sonrisa de Aluminé mutó en lágrimas, pero de alegría. Y  ahí estaba su mamá, Eugenia Gómez, para abrazarla y hacerle saber que también estaba feliz por su logro, fruto de su responsabilidad, y por este camino que empieza como estudiante universitaria.

“Estoy muy contenta de estar acá. Es una gran oportunidad, porque nosotras venimos de un lugar que es muy lejos”, alcanzó a decir Aluminé antes que le ganaran las lágrimas. “Venir de tan lejos, poder conseguir un lugar para hospedarse, todos los gastos de la comida, más todo lo que ella va a necesitar para estudiar. Esto es muy gratificante. Agradecemos de todo corazón esta mirada que han tenido, para que los chicos del interior y de toda la provincia puedan estudiar”, dijo Eugenia.

“Estoy muy contenta por lo que nos dijo hoy el Gobernador y el ministro de Educación, me sentí muy complacida conmigo misma. Y porque puedo sacarle un peso a mis padres gracias a este mérito”, expresó la joven, que acaba de cumplir 18 años y es egresada del Instituto ‘Paula Albarracín’.