El analista económico y tributarista Fabián Medina explicó que el retorno de la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias no generará un impacto positivo en las arcas provinciales, como plantea el gobernador Claudio Poggi.

La modificación será incorporada otra vez en Diputados en el paquete fiscal que se debatirá este jueves.

El mandatario puntano, en cada aparición pública, reafirma su apoyo a la Ley Bases y, sobre todo, a la reforma fiscal que propone la administración de Javier Milei. En particular, Poggi aboga por la vuelta del tributo a los salarios superiores a $1.800.000.

El argumento del gobernador es que ese tributo incrementará los fondos que se coparticipan a las provincias, con lo que San Luis tendrá una suba en sus arcas.

“Estamos en medio de una recesión y, si en medio de la recesión, le cobrás 20 mil pesos en promedio a 800 mil trabajadores, de la recesión no salimos más”, analizó Medina.

Para explicar ese escenario recesivo, el economista publicó un artículo en Ámbito que destaca: “Realizando estas próximas devaluaciones tal como piden desde el exterior e interior del país (FMI y agroexportadores) nos hallaríamos con una inflación de punta a punta cercana al 600%, o par decirlo de otra forma en una hiperestanflación que el gobierno mismo generó al desconocer como se maneja la macroeconomía del país”.

Ante ese contexto, afirmó que las provincias, en particular San Luis, “en lugar de cobrar más por Coparticipación, va a cobrar menos”, si se aprueba el paquete fiscal.

Medina, que fue asesor de Poggi en su anterior gobernación, dijo que el mandatario debería “dejar la ideología y de ser opositor” a la gestión de Alberto Rodríguez Saá.

“Tampoco es de Juntos por el Cambio, es aliado a Juntos por el Cambio. Pero hay que cuidar lo que se ha hecho; podés tener problema con los Rodríguez Saá, o con el Partido Justicialista, pero no por eso te vas a negar a darle una buena calidad de vida a los ciudadanos de su provincia”, añadió.

Y consideró: “La primera gestión de Claudio Poggi fue muy buena; ahora, por lo que me dijeron, es una gestión similar a la de (el gobernador de San Juan, Marcelo) Orrego o (Alfredo) Cornejo en Mendoza: una guarangada”.