Una de las políticas habitacionales centrales del gobernador Claudio Poggi llegó a esa cifra este lunes, en un Salón Blanco colmado y atravesado por la felicidad de cada beneficiario.

Cuando Claudio Poggi asumió la gobernación de San Luis, allá por el 10 de diciembre de 2023, soñaba con retomar inmediatamente una de sus políticas favoritas: la construcción de viviendas. Sin embargo, al heredar una provincia fundida y “por debajo de la lona”, se vio obligado a posponer ese deseo durante un tiempo hasta poder acomodar las cuentas y así reanudar con los antiguos beneficiarios del plan ‘Progreso y Sueños’.

En el mientras tanto, detectaron una necesidad latente en la sociedad, de facilitarle al beneficiario de una vivienda social el acceso a la escritura, un documento indispensable para cerrar el círculo definitivamente sobre la propiedad. De esa manera, nació la primera política habitacional del segundo mandato de Poggi, que fue lanzada por el ministerio de Desarrollo Humano en febrero bajo el nombre de ‘Escriturá tu Casa’.

Este lunes, en una nueva ceremonia de ‘Escriturá tu Casa’, la propuesta alcanzó la entrega 1.000, con la presencia de familias de La Punta, Juana Koslay y la capital. Como siempre, el Jefe de Estado encabezó el acto y disfrutó junto con cada vecino la emoción del logro. “Fue una de las primeras iniciativas que impulsamos, remover las trabas y facilitar el acceso a la escritura, porque es un derecho que tienen y que lleva a enormes beneficios”, señaló el Mandatario, quien modificó el número del emblemático banner del Programa, para pasar de 937 escrituras entregadas a 1.047.

A lo largo de siete meses, cientos de familias fueron beneficiándose de la remoción de obstáculos burocráticos y la eliminación de impuestos estatales antiguos, que demandaban el abono de un 30% del valor de la casa en el mercado para obtener la escritura. Así, uno a uno fueron completando un trámite que antes se percibía tedioso, impagable e inalcanzable.

Detrás de cada vecino que tomó en algún momento el centro del Salón Blanco de Casa de Gobierno para recibir su carpeta azul, hay una historia. Es una historia que, en mayor o menor medida, repite un patrón y camino similar, al margen de los detalles. Es una historia de sacrificio, perseverancia, frustraciones, desesperanza, resiliencia, confianza y, finalmente, satisfacción.

Sacrificio por todo lo que implica acceder a la vivienda y mantener al día el pago de las cuotas, en un país cuyo contexto rara vez da tregua. Perseverancia porque el camino al techo propio no termina cuando uno recibe las llaves, persiste muchas veces durante años hasta recibir la escritura.

Frustraciones y desesperanza por haber sido una especie de ‘rehén‘ de decisiones políticas anteriores, que impregnaban sobre el trámite un sinfín de barreras administrativas y económicas que parecían diseñadas para tornarlo inaccesible. Resiliencia porque, a pesar de eso, no bajaron los brazos.

Confianza en la nueva gestión del Ejecutivo, que lanzó en febrero una iniciativa para facilitar la realización de la escritura, aquella que entrega fundamentalmente seguridad jurídica y tranquilidad familiar. Satisfacción, por la tarea cumplida.

“La escritura valoriza la casa, si la quieres vender te permite cobrar por lo que realmente vale esa propiedad. Da tranquilidad jurídica a las familias, cierran un círculo. Eso produce alivio en las familias, permite ir acomodando las cosas para los hijos y nietos. Si uno quiere ser garante, te piden la escritura. Bueno, ustedes hoy la tienen, así que felicitaciones”, les expresó el Gobernador a los vecinos que llenaron el recinto.

El director de Vivienda y Regularización Dominial, Hugo Rossi, agregó que el Programa “marca un antes y un después en materia de escrituración de viviendas sociales” y destacó el rol de otros organismos que cumplieron roles esenciales para cumplir la meta. “El Registro de la Propiedad, Catastro San Luis, el Colegio de Escribanos, todos se sumaron a la propuesta que hoy los tiene como beneficiarios de la escritura”, remarcó.

La palabra de los beneficiarios

Alfredo Baigorria vive en el barrio 171 Viviendas, ubicado en la zona de la segunda rotonda, y durante años soñó con esta jornada. “Vengo acompañado con mi señora Sara”, dijo el vecino. “Es una casita muy bonita, estamos al pie de los cerros, muy pintoresco”, contó con orgullo el flamante dueño de la vivienda que, gracias a ‘Escriturá tu Casa’, vio facilitado el trámite de acceso a la escritura que para él y su núcleo familiar (son cinco), les aporta “ser dueños de algo. Es poder tener también el derecho de dejarle algo a nuestros hijos, porque es algo muy especial ser propietario”.

El acto tuvo carácter institucional, pero eso no impidió el tinte festivo que acompañó cada momento. A tono con eso, la organización decidió sortear un Smart TV que recayó sobre Hugo Agüero. “Es una celebración doble”, expresó entre risas. Sobre la escritura, el vecino del barrio Serranías Puntanas mencionó que “lo más importante es la seguridad que brinda, no solo a nosotros sino a nuestras hijas. Uno hace todo por ellas y haber cumplido este objetivo nos deja una tranquilidad enorme”.

Una propuesta abierta a todos

El número 1.000 tiene un impacto simbólico y es fiel reflejo del éxito de la iniciativa, pero el objetivo nunca fue conformarse con esa cifra. “Queremos una provincia de propietarios, no de adjudicatarios”, afirma siempre Rossi. ‘Escriturá tu Casa’ fue creado con la intención de llegar a todos los sanluiseños que estén en condiciones de acceder al documento.

Por ese motivo, Poggi volvió a reiterar que “no hay plazos de vencimiento” para iniciar el proceso y que “estará a disposición durante todo mi mandato”. Aún así, instó a los que ya conocen los frutos del beneficio a compartir la experiencia con familiares, vecinos, amigos y conocidos. “Hay que aprovechar el envión”, enfatizó el Mandatario.

Aquellos interesados en sumarse deben dirigirse a la página oficial del Gobierno, ingresar al apartado de ‘Escriturá tu Casa’, completar el formulario de inscripción y aguardar la convocatoria de los funcionarios para cumplir el sueño.