Argentina registra un incremento del 42% en los contagios de sífilis, alcanzando niveles históricos. El grupo más afectado abarca a personas de entre 15 y 34 años.
Los datos oficiales, elaborados por el Ministerio de Salud y difundidos esta semana en el Boletín Epidemiológico Nacional, advierten que en 2023 se detectaron 32.293 nuevos casos en el país.
“Las notificaciones de sífilis a nivel nacional y por regiones muestran una tendencia ascendente en los últimos años. Las poblaciones más afectadas son las personas de entre 15 y 34 años”, detalla el reporte.
La curva de contagios ha subido desde 2010, cuando se registraron menos de 5.000 casos, cifra que se mantuvo entre 1994 y 2001.
El informe se centra en el período 2018-2023. En ese lapso, se notificaron 129.620 casos en total. Al inicio del período se registraron 22.734 casos, mientras que en 2023 la cifra superó los 32.000. En el mismo período, también aumentó la tasa de incidencia de la enfermedad: en 2018 fue de 51 casos por cada 100.000 habitantes, mientras que en 2023 subió a 69.
En 2023 se registraron 763 casos, un incremento significativo frente a los más de 700 reportados el año anterior. Hace cinco años, los contagios eran casi tres veces menos.
La sífilis es causada por la bacteria Treponema pallidum y se transmite principalmente por contacto sexual con una persona infectada, a través de úlceras genitales o bucales. También se puede propagar por transmisión perinatal o mediante transfusiones de sangre. La infección es curable con antibióticos, pero si no se trata a tiempo, puede generar problemas graves de salud.
“Si bien no contamos con datos específicos, observamos cambios en los hábitos sexuales, sobre todo entre los jóvenes”, explica Andrés Burke Viale, médico especialista en salud pública, en declaraciones al diario El País.
“Por un lado, se nota un uso inadecuado o un descenso en el uso del preservativo. Por otro lado, hay un aumento del sexo casual”, añade. “Las mujeres jóvenes encabezan las estadísticas de contagios. Esto podría deberse a que, en Argentina, las mujeres acceden más a los servicios de salud y están más atentas. Los hombres, en cambio, solemos acudir en fases tardías o agudas de la enfermedad”.
Ante este panorama, Burke Viale resalta la necesidad de promover el uso correcto del preservativo en toda la población, sin importar la edad, no solo para evitar embarazos no deseados, sino también para prevenir infecciones de transmisión sexual.
El especialista subraya el rol central del Estado y advierte sobre el desfinanciamiento de las políticas sanitarias durante el gobierno de Javier Milei. “El presupuesto del Programa de Salud Sexual, creado por ley en 2005, ha sido ejecutado solo en un 20% este año. Ese programa no solo prevé políticas públicas para el diagnóstico temprano y el tratamiento, sino también para la prevención, mediante la compra de preservativos. En las provincias hoy faltan los preservativos que distribuía el Estado nacional. No es un tema menor, esta medida se implementa en países de todo el mundo”.
Con información de El País